Con la excusa de rebajar la tasa de abandono escolar temprano y del fracaso escolar, el bachillerato de tres años puede ser la coartada perfecta para : acabar con la comprensividad , abrir vías diferenciadas para el alumnado ( la académica para los buenos y la profesional para los malos) y convertirse en trampolín para la la concertación del bachillerato , vieja y reiterada demanda de los centros privados. En todo caso, y a la espera de cómo se va articular definitivamente, el debate está servido porque va a suponer un nuevo cambio de estructura del sistema educativo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario